Cambio Climático

Por cambio climático se entiende comúnmente el cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima observada en períodos de tiempo comparables (UNFCCC, 1992). Según el IPCC, los pequeños estados insulares como la República Dominicana son particularmente vulnerables a los efectos del cambio climático. Es probable que las consecuencias más importantes e inmediatas para los pequeños estados insulares estén relacionadas con los cambios en el nivel del mar, los regímenes de precipitaciones, los balances de humedad del suelo, los vientos predominantes (velocidad y dirección) y las variaciones a corto plazo de las pautas regionales y locales de la acción de las olas. Debido a su ubicación costera, es probable que la mayoría de las actividades e infraestructuras socioeconómicas y la población sean muy vulnerables a los efectos del cambio climático y la elevación del nivel del mar. Al mismo tiempo, la República Dominicana, como signataria del Acuerdo de París, se ha fijado objetivos climáticos muy ambiciosos. Tiene como meta climática que, para el año 2025, las energías renovables contribuyan el 25% de la generación de energía eléctrica y, para el año 2030, haber reducido las emisiones de Gases de Efecto Invernadero del país en un 25%, tomando como año base el 2010 con emisiones estimadas per cápita de 3.6 tCO2eq. El mayor potencial de mitigación de los gases de efecto invernadero se encuentra en los sectores de la energía, ya que la generación de energía eléctrica en República Dominicana se basa principalmente en combustibles fósiles, contribuyendo 27% a las emisiones brutas de Gases de Efecto Invernadero en el año 2015. En el 2019, 88.1% de la generación de energía eléctrica fue basada en combustibles fósiles y solo el 11.9% fue generado por energías renovables de las cuales 5.2% fueron energías renovables no convencionales.